Un lindo día soleado fue el marco propicio para el desarrollo de la cuarta edición del denominado "Circuito del Maní", una jornada de día completo destinada a mostrar todo lo que este cultivo diferente genera en esta amplia región del centro del país. "Un cultivo que nos enorgullece" afirma Raúl Faucher, Gerente de Originación de Maní de AGD, conociendo desde hace décadas lo que significa esta materia prima para la generación de fuentes de trabajo en toda la región.
La nobleza productiva del maní se destaca toda vez que uno debe referirse a la parte climática, por eso Faucher advierte, "esta zona donde está ubicado este lote de maní, es una de las más perjudicadas por la falta de precipitaciones estivales, con una faltante de más de 200 mm que no llegaron oportunamente, sin embargo el cultivo está en estado óptimo, con un rendimiento significativo".
Con respecto a la calidad del maní argentino, al éxito que se logró entre los exigentes adquirentes de esta delicada mercadería, Faucher entiende que el estándar del producto logrado con el paso de los años es el resultado de la responsabilidad con que actuaron los diferentes integrantes de la cadena: Responsabilidad en la calidad de lo producido, en el procesamiento, en el embarque, en el respeto con que se cumplieron los contratos; y esta imagen conseguida nos posiciona como los primeros y más importantes exportadores del mundo.
Con respecto a la perseverancia de los integrantes del Centro de Ingenieros Agrónomos de Gral. Cabrera y Zona en la organización de este evento, Faucher destaca el trabajo ad honorem de los técnicos, recordando su misión clave para la evolución de este cultivo: "Hace quince años estas mismas variedades de maní rendían 10 ó 20 quintales por Hectárea, y hoy superamos los cuarenta quintales; todo esto fue logrado por la capacidad y el trabajo esmerado de nuestros profesionales técnicos en su relación con los productores".
Las empresas relacionadas al sector manisero también se hicieron presentes para promocionar sus productos en el Circuito del Maní; en el caso de Bayer CropScience, la multinacional aprovechó para presentar una nueva molécula en su novedoso "Cripton", nombre comercial para un fungicida que el Ing. Mariano Boffelli describe como una innovación tecnológica a través de nuevos ingredientes activos en base a las Estrobirulinas; son las Triazolinthionas, cuya acción protectora sobre un amplio espectro de enfermedades, entre ellas la viruela tardía, ha sido suficientemente comprobada por la Compañía.
Como Jefe de Nuevos Mercados, Boffelli pone relevancia en la posibilidad, ahora real, de detener el avance de los hongos por la acción curativa y a la vez erradicante de Cripton, con efecto de larga duración. El resultado final se evidencia en la mayor AFUR (Area Foliar Util Remanente), generando plantas más vigorosas y con estado sanitario óptimo al momento del arrancado, con una alta relación positiva que se traduce en mayor rendimiento.
La tracción que soporta la planta en ese punto crítico que representa el momento del arrancado del maní, redunda en mayor eficiencia en cuanto al rendimiento, con plantas fuertes y sanas, de allí la importancia de mantener un alto nivel de AFUR en el cultivo
No hay comentarios.:
Publicar un comentario